Los lápices ayer y hoy
"Que nos digan a dónde han escondido las flores que aromaron las calles persiguiendo un destino, dónde se han ido." Víctor Heredia Era el año 1984 cuando empecé a transitar la escuela secundaria. La democracia, igual que mi adolescencia, se encendía por todas partes como una feliz novedad. Nueva, potente, apasionada, luminosa. Mi adolescencia, igual que la democracia. Tenía 12 años y Raúl Alfonsín comenzaba su mandato como el primer presidente constitucional. Para esa época también empecé a militar en la Fede, la Juventud Comunista y en el flamante Centro de Estudiantes de la escuela. Por ley, las autoridades de las escuelas debían colaborar en su creación, permitiendo las votaciones en las aulas, las horas de reunión, los espacios de encuentro. Éramos adolescentes y hablábamos de política, discutíamos, reclamábamos, íbamos a marchas, organizábamos actividades, publicábamos revistas. En varias ocasiones nos enfrentamos a las autoridades. Y de fendíamos