Somos esa memoria

Vengo de una familia de militantes. 

Mis viejos y gran parte de la familia  militaron toda la vida.

Yo era muy pequeña, tenía cinco años, cuando la dictadura comenzó, pero de esos años tengo algunos recuerdos.

Recuerdo, por ejemplo, la militancia clandestina en casa, y la cantidad de "tíos" que me presentaron y que entraban a mi hogar con todos los cuidados. Una vez uno de ellos me preguntó mi nombre "¿Cómo es que sos mi tío y no lo sabés?" dicen que dije.

Recuerdo lo difícil que fue para mis padres educar en las ideas de justicia y solidaridad a dos pequeñas charlatanes que querían contar todo lo que sabían. Recuerdo las mentiras que debíamos aprender de memoria por si nos preguntaban en la escuela.

Recuerdo los libros en doble fila, aquellos libros prohibidos de los que mi papá nunca hubiera podido desprenderse.

Recuerdo las conversaciones telefónicas  encriptadas. Una vez, muchos años después, un familiar recordaba las charlas entre nuestras madres sobre "eso que te di" y "dónde ya sabés" y nos reíamos pensando que de pura casualidad no las detuvieron por narcotráfico o vaya a saberse qué.

Recuerdo la llegada de aquel muchachito que vivió en casa durante un tiempo, no recuerdo cuánto y la felicidad que teníamos con mi hermana de tener un hermano mayor postizo que jugaba con nosotras y nos hacía barquitos de papel y avioncitos y que muchos años después, supimos, estaba allí escondido y muy asustado porque un amigo del barrio había sido secuestrado.

Recuerdo aquella manifestación violenta en la que estuvieron varias personas de mi familia. Recuerdo sus testimonios cargados de miedo.

Y sobre todo, recuerdo mucho aquel acto en el Luna Park del año '83. Recuerdo la emoción de mis viejos que era contagiosa. Recuerdo una multitud enorme de gente celebrando. Recuerdo la risa y el canto.

POR MI VIEJO Y POR MI VIEJA QUE ME ENSEÑARON A PELERLA.

HOY ES JORNADA DE LUCHA.

✊🌳



Comentarios

  1. Imposible leerte sin viajar a mi niña pasada que también, a tu edad, vivió esos años con consciencia.

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  2. Increíble como tus palabras son mias tambien tuve infinidad de tios que hoy ya no estan. Y un recuerdo auditivo increible de esos años fue.. vamos chile carajo recordando allende..que lo escuchabamos bajito en el winco junto a muchas personas que como tus viejos y los mios luchaban por un mundo mejor. gracias clau por traeme a la memoria infinidad de sensaciones

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