Hablemos de amor

¿Cómo sería tu vida si pudieras volver a vivirla con los conocimientos y las experiencias de hoy?

¿Quién no se hizo esta pregunta?

¿Qué cosas cambiarías si pudieras volver el tiempo atrás?

Y sí, a mí también a veces me gustaría poder viajar en el tiempo para cambiar algunas escenas de mi historia.

A veces me gustaría modificar el pasado, no mucho, sólo algunas situaciones.

Hay un montón de elecciones personales que seguramente no cambiaría: volvería a participar en los mismos espacios de militancia, estudiaría las mismas carreras. 

Haría gran parte del camino tal y como lo recorrí hasta hoy.

Todo eso es lo que me trajo hasta acá.

Quizás, eso sí, elegiría mejor los trabajos. No soportaría fácilmente el maltrato y la precarización. Me quedaría donde me valoraran y me respetaran.

Pero sin dudas, y creo que esta sería la razón principal para volver al pasado, tomaría otras decisiones en cuanto a los vínculos afectivos. 

Hablo de relaciones que sostuve pese a todo. 

Relaciones que sufrí demasiado.

Ojo que no hablo de evitar todos los sufrimientos. Además de ser inevitable creo que también tenemos que aprender a transitar el sufrimiento, las pérdidas, los abandonos.

Es otra cosa.

Digo que hubiera sido bueno evitar/me ciertos dolores innecesarios.

Ahora mismo, con mucha distancia en el tiempo, no puedo entender algunas relaciones que fueron ataduras y que fueron cadenas.

Aprendí a callar, a no decir.

Aprendí a aguantar, literalmente, un desaire, un desprecio, un maltrato. Aprendí a aguantar porque eso es lo que me enseñaron que se hace cuando se ama.

De eso se trata el amor romántico ¿no?

De pintar de rosa fosforescente todo lo que está mal en nuestra educación sentimental.

Así lo entiendo.

Pero ahora voy a un paso más y me pregunto si en el pasado alguna vez amé.

Me pregunto si en esta suerte de derrotero tan femenino que consiste en aferrarnos una y otra vez al sufrimiento y al maltrato, todo eso que sentí pudo ser realmente amor.

¿Podía ser amor?

¿Qué podía amar de ese otro?

¿Qué hubo en esa relación que me hiciera bien y cuánto me hizo mal?

¿Cuánto fue lo que construí en mi fantasía?

Porque en definitiva ¿Qué es el amor? 

Ya sé que es un tema difícil, imposible responder en un posteo, al menos en este.

Pero a esta altura, después de cincuenta y un años por la vida, creo que puedo saber, con cierta claridad, qué cosa no es el amor.

Desde muy chica aprendí, como en las películas, que el chico que me trataba mal, era el indicado. 

El desprecio era leído por mí como parte de un atractivo: El chico duro que esconde sus emociones. Misterio.

También podíamos perdonar la falta afectiva del otro porque seguramente había una historia difícil detrás, algo que justificaba esa cáscara, esa armadura.

Nosotras aprendimos a leer lo que no está escrito, a ver lo que está ausente. Fantasmas de amor, humo de colores.

Nunca nadie nos dijo que el amor debía ser otra cosa. El amor debía ser un intercambio honesto y abierto de emociones, un encuentro que nos sane, nos alimente, nos incentive a seguir cada uno en el mundo propio.

Eso hoy para mí es el amor.

Miento. No es cierto que nunca me lo advirtieron. Años de terapia me enseñaron que el problema era mío, mi historia familiar, mi educación. Con el tiempo pude ver que no era yo sola, "son cosas de mujeres", aprendí a decir entonces, y toda esa estupidez de Venus y Marte. "Somos distintos, así somos nosotras" decía.

Todavía me faltaba parte del recorrido.

¿Cómo aprendimos a ver el mundo en las telenovelas? ¿Quién nos enseñó?

Hay un legado que fuimos transmitiendo de generación en generación.

El amor es soportar, el amor es ceder.

¿Pero qué es el amor?

¿Es posible sentir amor cuando nada bello sucede, o sucede con cuentagotas?

No me refiero al amor que puede haber sentido o no la otra persona, aquel que alguna vez estuvo conmigo. Que haga su terapia, su búsqueda interna, su deconstrucción, o que no haga nada, haya él. Yo ya pasé por todo eso.

Me refiero a mí, a mis sentimientos ¿fue amor realmente lo que sentí cuando creí sentirlo, o se trató siempre de una construcción cultural?

¿Qué lloré cuando fui rechazada? ¿Qué cosas podía extrañar tanto?

¿Cuánto soporté por inseguridad, para sentir que formaba parte de algo o de alguien, para no estar sola?

¿Esos duelos, fueron por amor, o por fallarle a todos los que esperaban algo de mí?

¿Es en definitiva el amor una construcción cultural y nada más? Y si es así ¿cambian sus condiciones según los tiempos?

¿Aprendimos que amar es soportar para sostener y perpetuar un mundo que nos necesita sumisas? 

Pienso mucho en todo esto últimamente.

Pienso en mi historia y pienso en las pibitas que hoy se enamoran. Y pienso en mi hijo, en enseñarle que amar es cuidar, es acompañar el vuelo del otro y también es aprender a volar.

Juan está creciendo y alrededor, como monstruos, empiezo a ver todos los mandatos de masculinidad que acechan su crecimiento, su vida.

Sí. Una máquina del tiempo.

Como la de Marty MC Fly.

Eso quiero.

No saben el desastre que soy capaz de hacer.

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