Un tiempo verde

Todo lo que escribo últimamente es resultado del dolor y de la angustia.

Hace semanas que quiero escribir sobre otros temas.

Otros.

Escribir sobre temas que no sean necesarios ni urgentes, porque, después de todo, como dice el poeta: "necesario" es que esto cambie de una buena vez, y parece que para eso falta un tiempo largo.

Hace días, decía, que doy vueltas pensando en historias pequeñitas, historias remolonas, fugaces.

Quisiera escribir, por ejemplo, sobre una planta que creció desafiando al olvido.

Nada más y nada menos.

_________________

Patio chiquito plagado de macetas y macetitas.

Observación. 

El momento mágico del brote. El botoncito verde que crece en el tronco áspero cuando nadie lo espera.

El rosal de flores amarillas y anaranjadas fue el regalo de un día de la madre, hace más de cinco años. Desde entonces florece cada primavera, aunque le cueste. Unos hongos lo invaden cada tanto tiempo y tengo que pulverizar sus ramas con jabón potásico. Pero los hongos vuelven a aparecer, vuelven y vuelven y vuelven.

El rosal resiste. Sólo un tronco gris y seco, estoico, sostiene todo el ramaje.

Pero este invierno de pronto empieza a brotar un gajo nuevo.

Desde el nudo leñoso del rosal, el gajo crece y se convierte en tronco. 

El tronco sigue creciendo y yo siento que si ese rosal logró crear vida nueva todo es posible. 

Creo que el rosal es la vida misma.

A esa metáfora me aferro y lo observo cada día.

Pero una mañana cualquiera, mi hijo destruye la metáfora de un pelotazo.

Ni la esperanza nos está permitida, pienso, ni eso.

Los días pasan y hoy los descubro. A cada lado del tronco cercenado.
Brotes nuevos.

La vida que siempre encuentra el camino, pienso. La vida incontenible.

 Metáfora. 

¿Seremos cómo ese tronco?


________________________

El gajo en un vaso de agua. La raíz que espero y no llega. Levanto el vaso cada día e inspecciono con la mirada en el tronco verde. Busco y no encuentro nada de nada.

Y pasan semanas y semanas y varios meses. Alguien comenta que por qué no tiramos todo a la basura, si está claro que no funcionó por qué esperar.

Y que no, terca cambio el agua cuando me acuerdo. La verdad es que cada día me acuerdo menos.

Pero un día miro y ahí está, un pedacito de hebra blanca, leve, minúscula. 

Después de tanto tiempo la raíz.

Ese simple gesto de la naturaleza que anuncia que la vida sigue, pese a todo.

A ese pedacito de raíz, a ese brote verde, a esa vida me aferré estos meses.

____________

 ¿Cuanto tarda en salir un brote?

¿En qué momento aparece la raíz de un gajo?

¿Cuál es el tiempo en que germina la semilla?

Mirar y esperar.

Sentir.

Durante la pandemia salir al patio cada día fue parte de un ritual necesario.

La huertera. El olor de la tierra, la semilla, el brote.

En esos días probé plantar semillas de varias especies. Tuve suerte con los tomates.

Hoy, en ese pequeño espacio, crece un romero, una frutilla, una albahaca,  una menta y una plantita de lavanda. 

Un enrejado improvisado las protege de los instintos gatunos y cuando me asomo dejo que los aromas se me metan por la nariz.

Mientras tanto el mundo sigue girando, lo malo sigue siendo malo, lo injusto sigue siendo injusto y la realidad afuera de mi patio sigue doliendo. Pero los aroma son reales, tan reales como todo lo malo lo injusto y lo que duele afuera de mi patio.

A esos aromas me aferré en estos últimos días.

________________________

Somos un poco mejores cuando participamos en los ritos de la naturaleza. 

La jardinería debería ser una materia obligatoria en las escuelas. 

Durante la pandemia hicimos mucha jardinería con mi hijo.

En algún momento plantamos un par de ajos y de cebollas que habían brotado en el cajón de la verdura. Nos dio pena comerlos y decidimos dejarlos ser. Por unos meses tuvimos plantitas. Las flores de las cebollas crecieron hasta alcanzar la altura de Juan, pero duraron poco.

Lo mismo nos pasó con unas mandarina. Al abrir los gajos un día vimos pequeños brotecitos verdes en las semillas.

Semillitas de mandarina brotadas.

Maceta y tierra.

Una, dos, tres plantitas verdes y espinosas.

Mandarinas salvajes que posiblemente nunca den fruto.

Arbolitos pequeños cuyas semillas brotaron entre la pulpa de un fruto.

Arbolitos inesperados.

A verlos crecer cada día me aferro hoy como hace cuatro años.

___________________

Será que finalmente todo se relaciona?

Será que la resistencia es verde?

Será?



Comentarios

  1. La resistencia es verde 💚. Hermoso

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  2. Resistencia Verde......Esperanza Verde.......Brotes Verdes!!!! ojalá, brote la resistencia ,desde abajo, y alguna vez,se dé vuelta la tortilla!!!

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  3. resurgiremos como los brotes de las plantas con más fuerza .Esa es mi esperanza para mis hijos y nietos

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  4. Ojalá nunca dejemos de aprender y aprehender de la naturaleza! Ella es sabia!

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  5. Lamento comunicarte que no saliste de la angustia. Brota entre las palabras como tus plantitas. Si, trabajar con la tierra engendra filosofía. Qué poeta dijo que es necesario que todo cambie? yo tambien pongo ramitas en agua y cuando empieza a tomar agua y crece me siento triunfadora..El mundo humano no es tan alentador pero en nuestra corta vida algo podemos hacer,, no?

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    Respuestas
    1. "Es preciso que nos entendamos.
      Yo hablo de algo seguro y de algo posible.
      Seguro es que todos coman
      y vivan dignamente
      y es posible saber algún día
      muchas cosas que hoy ignoramos.
      Entonces, es necesario que esto cambie."
      (Raúl González Tuñon, La luna con gatillo.)
      Supongo wue si logramos crear vida de un retazo de otro ser, somos un poquito triunfadoras!💚

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  6. Me gustó tu texto, Clau. Muy necesario dejar por un rato la angustia de lado. No somos egoístas ni indiferentes por eso; por embobarnos ante una raíz nueva, por mirar la telenovela de la tarde, por llevar a cabo la actividad "hueca" o "vacía" que sea, por conversar sobre pavadas. En una época creía que sí, pero ahora pienso que si no nos bañamos en esos oasis no podremos responder a lo necesario. La alegría y el relax son necesarios y revolucionarios

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  7. No sé por qué mi comentario (el anterior) apareció como Anónimo. Soy Claudia Cichero

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  8. coincido con vos que ja jardinería debería ser materia en las escuelas , y sobre todo en la literatura , leerte , tus metáforas , tus modos verdes de ver la vida todo tan impecable que da gusto saber que las plantas pueden ser un punto de partida para nuestra conexión/ desconexión gracias por compartir y saber que siempre estamos muy pendientes de nuestras raíces

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